Bicarbonato de sodio: Tu aliado contra los malos olores
El bicarbonato de sodio es un imprescindible en el hogar. Además de neutralizar los olores, suaviza el agua y ayuda a eliminar los residuos de detergente. ¿Cómo se hace? Antes de lavar, añade unos 50 g de bicarbonato de sodio directamente al tambor o al dispensador de detergente. El resultado: ropa más fresca y una lavadora desinfectada de forma natural.
Sal gruesa: el secreto poco conocido para una ropa reluciente
Además de preservar los colores vibrantes, la sal gruesa actúa como un agente de limpieza natural. Absorbe la humedad y reduce la proliferación de bacterias que causan mal olor. ¿Cómo es posible? Antes de iniciar un ciclo normal, vierta unos 150 g de sal gruesa en el tambor. Este consejo es especialmente efectivo para prendas de algodón y toallas de baño.
Hojas de laurel: un aroma sutil y natural