Sofreír los ingredientes:
En una olla grande, derretir la mantequilla a fuego medio. Añadir el ajo picado y sofreír durante 1 minuto. Luego, añadir la harina y remover enérgicamente hasta obtener una pasta homogénea.
Para preparar la base cremosa: Vierta poco a poco la leche y el caldo de pollo, revolviendo constantemente para evitar que se formen grumos. Lleve a ebullición suave y luego agregue el queso parmesano. Revuelva hasta que el queso se derrita, creando una salsa espesa y cremosa.
Agregar las verduras: Añada las zanahorias picadas a la olla y cocine a fuego lento durante 5 minutos. Luego, agregue las espinacas frescas y cocine hasta que se ablanden.
Agregar el pollo y los tortellini: Incorpore el pollo y los tortellini a la sopa. Cocine durante 5-7 minutos, o hasta que la pasta esté tierna. Sazone con sal, pimienta y orégano al gusto.
Para servir: Sirva la sopa caliente en tazones y decore con pimienta recién molida y un poco de queso parmesano rallado. Sugerencia de presentación:
Acompañe con una rebanada de pan fresco o una baguette. ¡Perfecta para los días fríos o como una cena completa para toda la familia!
¿Por qué te encantará esta receta?
¡Increíblemente cremosa y sustanciosa! Fáciles de preparar: ideales para días ajetreados.
Una explosión de sabores: tortellini, pollo y parmesano en perfecta armonía.