Preparación de la base:
Triturar las galletas en un procesador de alimentos o con un rodillo.
Añadir la mantequilla derretida y mezclar hasta obtener una crema suave.
Verter la mezcla en un molde desmontable (de unos 20 cm de diámetro) y presionar bien. Refrigerar durante 15 minutos para enfriar la base.
Preparación del relleno de tarta de queso:
Bate la nata para montar (30% de materia grasa) hasta que se formen picos firmes.
En un bol aparte, bate el queso crema con el azúcar glas, el cacao en polvo y la esencia de vainilla hasta obtener una mezcla homogénea.
Derrite el chocolate negro al baño maría o en el microondas e incorpóralo suavemente al relleno del cheesecake.
Añade la nata montada e incorpórala con una espátula hasta que todos los ingredientes estén bien integrados.
Añade el chocolate troceado e incorpóralo con cuidado.
Vierte la mezcla sobre la base preparada, alisa la superficie y refrigera durante al menos 4 horas, preferiblemente toda la noche.
Preparación del glaseado:
Calienta la nata para montar (30% de materia grasa) en un cazo, sin que llegue a hervir.
Añade el chocolate troceado y remueve hasta que se derrita por completo.
Deja que se enfríe un poco y luego rocíalo sobre el cheesecake.
Refrigera el cheesecake durante otros 30 minutos para que el glaseado se endurezca.
